Aquí radica una grandeza humana que ya os he acercado, un gran aprendizaje que he recibido.PARTICULAR. PARTICULARIDAD. Somos particulares. Todos somos humanos, personas y cada una muestra lo que puede, quiere, sabe o no muestra, o se bloquea, o ya no muestra y antes mostraba…

Por tanto, si sientes que como persona particular, como individuo único que eres, te notas perdido, desubicado, agotado, desorientado, apático, que no avanzas, que tienes soluciones y las has probado y no han generado mejoría…puedes plantearte vivir unas sesiones individuales.

Vivirás tu acompañamiento personal, serás una PERSONA QUE ACOMPAÑO (PQA).

Un esquema muy sencillo que ayuda a comprender qué se trabaja en una sesión o diversas es el siguiente.

       1) PQA PROPONE TEMA (RETO, OBJETIVO)

       2) COACH PREGUNTA Y GENERA DESARROLLO

       3) SE PLANTEAN MICRORETOS AL PQA 

       4) SEGUIMIENTO DEL RETO, OBJETIVO

       5) FEED BACK DEL RETO, OBJETIVO

 

 

 

La clave de la sesión es captar cual es el tema básico para acompañar y si una persona responda con un NO SÉ o ESTOY TAN BLOQUEADO/A o con respuestas similares a estar desorientado y perdido, la clave es generar una búsqueda del sentido vital de esa persona, y esta tarea requiere de un proceso, tiempo, dedicación, sensibilidad, recursos…

No me cansaré en repetirlo: generar crecimiento consciente, ese es mi trabajo. ¿O acaso una persona no quiere crecer?. ¿No es una inclinación inherente en todos los humanos? Crecer, crecer y crecer, desarrollar, evolucionar, mejorar.

En las sesiones ese es el gran desafío, reto, objetivo por recorrer. CRECER CONSCIENTEMENTE.

Las sesiones suelen durar una hora. La duración, la frecuencia, plantearse un número de sesiones…me parece un tema particular, que se debe observar, que fluye, que se genera. No siento sólidos argumentos para transmitir que lo ideal son “X” sesiones, que duren “X” meses.

No.

Sencillamente te animo a contactar conmigo, preguntar si así lo deseas tus dudas, y por qué no, si tu voluntad es crecer y lo decides libremente, atrévete a conocerme. A partir de ahí, la historia se seguirá escribiendo.