Cada vez que escucho a alguien pronunciar la palabra JAMÁS, me recuerda…

Que mi abuela me decía que esa palabra no salía en su diccionario para la vida, porque la vida está llena de grandes momentos que sólo se consiguen si no te das por vencido y luchas por ello.

De modo que ese día salí a la calle decidido a darle un nuevo significado a esa palabra, y una vez en la calle, cruzada la esquina, una ráfaga de viento se llevo mi pañuelo y cuando corría tras él, me crucé con ELLA. Estaba sentada con las piernas sobre la acera y con tizas de colores pintaba los adoquines. Al girarme, agradecí al viento que hubiera detenido mi pañuelo a los pies de aquella persona…

Nos miramos. Invitamos al silencio durante 3 minutos. Se autoinvitó. A veces aparece de forma incómoda pero esta vez, el silencio hablaba más que nunca. Sonreímos. Nos dijimos con la mirada un quebienquenotehayasidodemivida… 

ELLA se levantó, me abrazó y me dijo: hasta pronto, llámame, cuando quieras estoy disponible para nuestro encuentro.

El viento se convirtió en tormenta, de esas que en un bosque disfruto sin paraguas pero que en la ciudad, te generan prisas, miradas al suelo, frío… Debía llegar a casa. Calentarme, tomar una taza de té y pensar en nuestro encuentro…dejarlo sentir.

Hacía tiempo que no la veía, llámala persona, ser, esencia o como tu quieras. Pero creía que nunca más la encontraría. Bendito viento, bendito pañuelo.

A pocos metros de mi casa, mi cueva, mi refugio volví a toparme con ella. Sin esperarlo. Decidí que debía llamarla, estaba en deuda con ELLA después de tanto tiempo. 

No tuve que descolgar ningún teléfono, ni enviar watsaps, ni emails. Simplemente, deje que la OPORTUNIDAD volviera a mi vida, la OPORTUNIDAD de permitirme disfrutar, crecer, salir de una situación compleja. La OPORTUNIDAD de evolucionar, mejorar, asumir, aceptar, afrontar.

Hacía tiempo que no la llamaba, estaba anclado a la palabra JAMÁS, palabra dura, con sonido potente, con colores oscuros. El viento se la llevó. Me condujo a la OPORTUNIDAD.

Llámala, no comunica!!, la oportunidad de crecer, de seguir, de avanzar está más cerca de lo que sientes.

Y es que desde hace tiempo pienso que la mejor APP es la APPrendizaje consciente, sanador, donde un JAMÁS desaparece con un golpe de viento, viento que conduce a la OPORTUNIDAD.

Gracias por colaborar AMELIA, ROSALIA, DANIELA, ANNA, LAURA, RAÜL Y MARTA. Tomar vuestra OPORTUNIDAD, es vuestra.